Tente paciencia

Paciencia es una palabra que me gusta mucho. Como una persona naturalmente hiperactiva, el que alguien me tuviera paciencia siempre fue algo que interpreté como sinónimo de amor. Dentro de expresar ese lado de mi, se encuentra gran parte de mi paz. Así soy y ser yo me da paz.

Para hacer muchas de las cosas que he querido hacer, he tenido que cambiar quién estoy siendo. Dependiendo de mis metas, leo, hablo y busco los temas que me ayudarán a conseguirlas. Pero saberte la teoría no es aplicarla. Yaunque la información sea simple y valiosa, no siempre estamos listos para aplicarla y cambiar nuestra programación.

Quiero hacer muchas cosas y me sé la teoría de cómo se hacen. No hago ni la mitad porque no me toca hacerlas, por lo menos ahora. Estoy viviendo lo que la vida me quiere enseñar en este momento y a este ritmo, sin discutir.Hay cosas que empecé a hacer este año que me había propuesto hacer hace cuatro. Ahora entiendo porque en ese entonces ‘’no podía’’ y agradezco estarlas haciendo actualmente, con nueva información sobre mi y sobre lo que quiero de esta vida.

Los libros de motivación, superación personal y pensar positivo, son un arma de doble filo. Alguien te dice cómo ser feliz, lo intentas y el subidón te dura lo que un espresso. Buscamos respuestas en todas partes menos en el lugar donde vamos a encontrar las correctas. Muchos libros, información, conversaciones y ninguna fuente te va a dar lo que el silencio contigo mismo te va a revelar.

Hay que saber identificar CÓMO se siente la información dentro de nosotros y quedarnos con las partes que nos emocionen, se nos queden pegadas por semanas o nos den un sentimiento de ‘’ping’’. No necesitas nuevas ideas, necesitas aplicar las que constantemente se te vienen a la cabeza e ignoras.De todo lo que lees y todo lo que escuchas, te van a hacer cosquillas las cosas que te haría bien aplicar. A veces cosas tan sencillas como ‘’TENDER TU CAMA’’ (es de un libro y una idea de los navy seals) son las que te cambiarán la vida.

No busques grandes respuestas y te desesperes cuando fallas en aplicarlas todas al mismo tiempo. Aplica las que te resuenan, las que regresan. Dales oportunidad de materializarse en tu vida para que puedas ver porque siguen buscándote. Y tente paciencia cuando hagas lo contrario a lo que ‘’sabes’’ que es lo correcto en papel. La experiencia es mejor maestra que cualquier libro y hay cosas que tendrás que experimentar en carne propia.Esto no quiere decir que hayas fallado por no aplicar lo que sabías que era lo correcto. Tal vez lo correcto para ti era equivocarte para aprenderlo de verdad.

Tu vida se está comunicando contigo todo el tiempo y por más que sepas con la cabeza, hay que aplicar la inteligencia interior. Las cosas que son para ti se sienten bien, te dan paz aunque sean difíciles, te hacen sentir más tú, te dejan descansar por las noches.

Todo es poner a prueba lo que aprendes para ver qué se debe quedar contigo. Ten paciencia. Crecer, realizarte, crear una vida que se sienta auténtica para ti, ser completamente quién eres sin miedo, son cosas que toman tiempo y práctica. La manera más rápida de llegar es ir poco a poco.Acuérdate que la paciencia es un lenguaje de amor, en este caso de amor propio. No hay prisa cuando ya estás en camino.